Sobre la manera de organizar el trabajo pastoral, explicó:
“Cada arciprestazgo nos reunimos mensualmente, pero no solo los curas sino también las religiosas y los laicos, responsables de las áreas de pastoral. Y a nivel diocesano, cada dos meses también hay reuniones con el obispo organizando los planes de pastoral. Se trabaja mucho con los laicos y eso muy interesante, muy bonito. Aquí estamos un poquito atrasados en eso, no veo que a los laicos se le dé tanta cancha”.
Sobre su labor, dijo Antonio Fernández:
“Yo pasé 8 años yendo a la montaña, a algún lugar se tardaba tres horas en subir, y a otro una hora y pico. Hice un trabajo que le llamaba pre-evangelización. Era acercarse, conocer, organizar, formar, poner a alguien responsable de unir a la gente, darles por lo menos dos años seguidos de catequesis antes de empezar a celebrar Misa y antes de bautizar a nadie. Pero cuando ya empezamos con la Misa, la gente, sobre todo los inmigrantes haitianos, querían el bautismo. Así que estuve 8 años sin bautizar a nadie en la montaña, y el último año bauticé 200 chiquillos”.
“Como algunos de los que vivían en la montaña habían aprendido en sus comunidades en Haití, ellos nos enseñaban las canciones en creole y luego los poníamos a ellos a enseñar. Al final alguno que sabía leer lo poníamos de catequista, luego le damos un poquito de seguimiento de algún cursillo y al final lo dejamos que cada domingo leyera la Palabra de Dios, predicara y le diera catequesis a los niños”.
Uno de esos formadores que colaboraba con Antonio se ordena sacerdote el 9 de noviembre:
“Él se iba a la montaña los lunes y volvía los viernes. Y a veces se quedaba también seguido. Preparó a la gente para el bautismo, la comunión, la confirmación, hizo un coro con los muchachos. Eran totalmente analfabetos. Dos de esos jóvenes están en un Seminario y también hay dos chicas religiosas. ¡Increíble! Van saliendo cosas bonitas de una comunidad perdida de la montaña que gracias a inventar estas escuelitas a base de visitarlas, buscar ayudas e irlas manteniendo”.